Viernes: Correazo al padre, esposo, suegro, novio: Este se lo dan sus parejas, que es a la larga, más
suave que el rodillo y una maleteada. Con el mismo, se evita el alcoholismo, el
machismo, los gritos, el gasto del sueldo en apuestas, tener otra, ser mal
contestón, salir con los amigos o terminando de salir del closet por presión
(sí la canoa no estaba mala ¿para qué abrir el hueco que la hundirá a lo
último?. Así van derechitos, porque se los pueden dar dormidos y un correazo en
el pipí, ha de doler como una quemadura de 1ro, 2do, 3er grado, liceo y
universidad. Y los novios que quieran adelantico, sabrán cómo hacerlo para no
meterse en un paquetico. LOS CORREAZOS
SON CORRECTIVOS, EDUCATIVOS Y UN EFECTIVO RECORDATORIO.
Sábado:
Correazo a los abuelos y abuelas. Para los
mayores de la casa, esos que se ponen necios saliendo a hacer mercado solos y
no pueden cruzar la calle con la bolsa, habiendo manganzones en casa que les
pueden ayudar. Para las abuelas libidinosas que se recuestan de jóvenes en los
buses y para aquellos que forman líos en el banco, además de tirarse unos
cuantos peos que suenan con fanfarria, también les sale correazo.
Domingo:
Misa, Caminata y Verbena del Correazo en
Familia: En la misa, el cura llamará a toda la feligresía a recibir la
comunión. El que no se confiese ¡correazo!,
quien no tome la hostia ¡correazo! Todo
esto casi al final de la misa, porque ya no se podrán sentar.
La caminata será de 10
kilómetros y todo aquel que pase sin saludar a otro caminante ¡correazo!, el que esté buceando a las
chicas descaradamente, en vez de hacerlo sutilmente ¡correazo! Quien se le marque el bollo intencionalmente en los
shorts ¡correazo! Y quien hieda ¡correazo!. La caminata la ganará quien
tenga las piernas y nalgas menos quemadas, ya que esa es la marca de que lo
hizo bien. Como premio, le podrá dar correazos a quienes pierdan.
Puede elegir el correazo con la correa del modelo y color que prefiera |
Y la verbena será una reunión
de fraternidad, donde se verá toda esa decencia, disciplina, respeto, buenos
modales, cortesía, afabilidad, responsabilidad, ayuda, apoyo que tanto necesita
Venezuela y que se ha ido perdiendo y pervirtiendo.
Todo esto, claro está, porque
quieren sus regalos en Navidad y mucho más, comerse una hallaca sentados, no
como para ese instante que tendrán el culo ardido por pecadores y no hacer las
cosas bien el resto del año, a punta de correazos nos criaron, pues es el
momento de recuperar esa bella tradición antes de que esto se nos llene de
choros, bebés no deseados, machistas, feministas odiadoras, políticos ladrones
y más meones en las calles.
Con las viejas tradiciones, en
una semana crucial, libraremos de todo mal, a esta y otras naciones
FELIZ
SEMANA DEL CORREAZO EN FAMILIA
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