Un hombre budista sin necesidades: nicolás maduro

El más grande hijo de Buda, parido en esta (planeta) Tierra, es un hombre sin necesidades. A las pruebas me remito:

No necesita desodorante. Y vive despreocupado, contrario a los que sí usamos.
No toma refrescos. Por ello ni sabe que cuestan más que la gasolina. No le da sed, es medio camello.

No toma agua. No sabe cuánto cuesta una botella de agua, quién la envasa. Y suponemos que no requiere bañarse, su inmunidad presidencial lo aleja de tal requerimiento. Por eso no le importa la sed.
No paga publicidad. Por ello mete las cadenas a las horas de Prime Time, porque no tiene que ver con difusión de productos, no le gusta la productividad.

No come pasta, caraota ni arroz. Porque diría que le cuesta conseguirla y/o tiene tiempo que no se come unas caraotas con pastas o con arroz porque no las consigue.
No va a baby shower ni bodas. No sabe cuánto cuesta la ropita de bebé ni hacer un regalo a unos recién casados.

No requiere casa, porque ya tiene. Una que consiguió con ayuda gubernamental de la cuarta. ya no tiene más interés en nueva residencia y menos en que otros la tengan, porque tendría que portarse como los de la cuarta con él y esa necesidad es impureza a su ¿alma?
No sale con amigos. Por ello no tiene interés en cerveza, taxi, cine, pasapalos, condones, hoteles o demás. Banalidades humanas las cuales él superó y que los demás deben emularle, aunque no quieran ni se lo merezcan, pero deben hacerlo.

nicolás maduro no tiene necesidades, pero los venezolanos sí. He allí la diferencia.

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