El oso polar u oso blanco (Ursus maritimus) es una especie de mamífero carnívoro de la familia de los osos y es uno de los carnívoros terrestres más grandes de La Tierra. Ese oso que se confunde en la nieve y que algún camarógrafo toma en una foto panorámica para que alguien salga con una tendencia viral de “¿dónde está el oso polar?” y millones de personas lo consiguen, menos usted y yo hasta que nos mandan la foto con la flechita.
En los últimos años he admirado, -y hago énfasis en admirado-, a un personaje de Cartoon Network del cual es muy digno aprender, él es Oso Polar (Ice Bear en versión original) de la serie “Escándalosos” (We Bare Bears en versión original, la traducción es tipo sal y pìmienta al gusto), un personaje que casi no habla y que al hacerlo, desmonta a los hablachentos.
Una vez me dijeron que hay que hablar bastante porque el que no habla mucho y se queda muy callado, tiene más tiempo de tramar cosas psicóticas y mucho peor, le da mal aliento. Quizás por eso hablo bastante, no me gusta tener mal aliento. Pero Polar es un dibujito así que eso del aliento pasa a otro plano y queda lo psicótico.
Él habla en tercera persona, como hacemos los genios de común cuando queremos tener una conversación inteligente o cuando no tenemos monólogo interno y debemos ir hablándonos a nosotros mismos pero fingiendo que lo hacemos por el celular en la calle, tramoya que muchas veces se cae cuando el teléfono suena en plena conversa y la gente se da cuenta que estábamos hablando con nosotros mismos, como hacemos los forever alone.
Sus diálogos son pocos, pero muy incisivos y llenos de gracia. Así como lleva a sus hermanos Panda y Pardo en su espalda, lleva a cuestas el programa. Me hizo recordar aquel comentario que hiciera Robin Williams sobre Arnold Schwarzenegger, “es increíble que haya tenido tanto éxito con tan pocas palabras en sus películas, sus diálogos son menores que los de la perra Lassie”.
Como toda persona obsesiva que drena su energía, él limpia y cocina. Sí cree que eso no es obsesivo, vaya a donde su abuelita o cualquier abuelita y vea cuánto le da de comer, cuánto limpia, cuánto le arregla la ropa y cómo saca su hacha si no quieres comer ni colaborar en la limpieza, tal cual hace Polar.
Frío, calculador, casi sin expresar sentimientos (casi, el estoicismo tiene sus limitantes en quienes saben la verdad del vivir, que es el convivir), creado con trazo sencillo y con expresión de ese amigo que todos tenemos que parece que anda en La Luna y está en su mente buscando la partícula de Dios, diagramando una compleja fórmula estructural o meterte el pie para que pares de hablar y él poder seguir oyendo esas voces terroristas en su cabeza que piden que busquen fósforos y gasolina para darle candela al colchón.
Muchas veces se nos olvida escucharnos, con la voz de la razón, la calma, la equidad. Pensar en frío actuando en caliente. Aguantando la lengua hasta que la contraparte se explique, porque más se falla cuando se da la primera palabra, esa que pudo parar guerras, divorcios o que termines invitándole el desayuno a alguien que traía su dinero y te podía brindar a ti, pero te fuiste de bruces hablando.
“A veces vemos, pero no observamos”, decía Sir Arthur Conan Doyle, el creador de Sherlock Holmes. Me parece bueno complementarlo con “A veces hablamos, pero nada útil expresamos”. Porque nos vamos de bruces hablando sin parar. Sí estamos destinados a meter la pata al hablar, que sea bien pensado, bien sentido, bien ambientado. Vale más que lo que digas sea la verdad (no “tú verdad”, sino la verdad), no avasalles, te centres en el punto, no compares, no vayas con las ganas de que te pongan los dientes en la boca como el arroz en la sopa, comunícate y en la medida de lo posible, regala una sonrisa sincera.
Polar, una alegoría a un embellecedor con lúpulo y cebada de Venezuela, que también se ajusta al mercado infantil o de desayunos en forma líquida de malta. Quizás por eso Polar de Escandalosos anima tanto, es como una cosa de familia.
Detalles curiosos: Sus hermanos Pardo (Grizzly) y Panda, rara vez dicen su nombre; es más, sólo se los he escuchad decir una vez a cada uno. En el episodio "YURI Y EL OSO", se puede comprender cómo Polar aprendió lo que sabe y porqué habla en tercera persona, emulando a su mentor. El mejor episodio de la serie, a mi parecer.
Detalles curiosos: Sus hermanos Pardo (Grizzly) y Panda, rara vez dicen su nombre; es más, sólo se los he escuchad decir una vez a cada uno. En el episodio "YURI Y EL OSO", se puede comprender cómo Polar aprendió lo que sabe y porqué habla en tercera persona, emulando a su mentor. El mejor episodio de la serie, a mi parecer.
Lcdo. Argenis R. Serrano.
Twitter e Instagram: @Humoristech
1 comentario:
También considero "Yuri y el oso" como el mejor capítulo. Que me hizo llorar y querero aún más.
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