Las redes sociales están en todo y eso, es lo peor que tienen. La Organización Mundial de la Salud las considera un problema de salud pública y eso ayuda al aumento de su uso, porque a nadie le interesa lo que dice la OMS.
Su posees esta adicción, te decimos que debes buscar quién te ayude a disminuirla. Y si lo consigues y sirve, vienes y nos dices, que nosotros estamos iguales.
10 consecuencias de la adicción a las redes sociales
1) Te molesta tener que levantarte temprano, luego de haberte acostado tarde viendo de todo en tu teléfono. Acusas a tu jefe de ese malestar y terminas en el ministerio del trabajo solicitando indemnización por despido injustificado. No te dan la razón y gana tu jefe.
2) Gastas el salario comprando la hamburguesa gigante con papas fritas y tequeños hecha para dos personas que viste en TikTok. Te la comes tú solo. Se te declara la gastritis. No puedes comprar medicinas porque lo gastaste todo en hamburguesas.
3) La ilusión de conseguir pareja en Tinder, Match o cualquiera de esas redes sociales te desvive y cuando por fin consigues a alguien, debes pagar el nivel Premium. Lo pagas con dinero prestado. La otra persona no te acepta. Y sí te acepta, cuando se conocen, resulta transgénero porque se siente caníbal.
4) Colocas muchos estados en WhatsApp tratando de llamar la atención de alguien en especial. Esa persona especial no te quiere agregar a su teléfono, así que no puede ver tus estados. Tus tías, se preocupan y tus primos, se burlan.
5) Te la pasas jugando todas las aplicaciones que tiene Facebook y que dicen definir tu actitud con tu foto y unas preguntas, porque no tienes amistades que te digan eso. Y el resultado es negativo, le das lástima a la app.
6) Resultas culpable de pasar un virus cadena que infectó tu teléfono por estar haciéndole caso a cualquier promoción de ganarte un carro o una bolsa de comida con media caja de cervezas sí haces clic en un enlace. Y te gusta.
7) Comienzas a hacer lyp sinc de videos en TikTok con chistes de otros. Lo haces mal. Además, tus amigas te dejan de seguir porque cuentas esos chistes. Les aclaras que tú no los estás contando. Igual eres tú y el audio. Pierdes amistades.
8) Tu familia y amistades creen que eres súper tecnópata y puedes arreglar cualquier problema o explicar cualquier situación con las aplicaciones, herramientas y demás del teléfono y la computadora. Los decepcionas y dejan de tratarte cuando dices que no sabes de eso que preguntan, porque creen que les estás sacando el cuerpo o les quieres cobrar.
9) Algo se te quema en la cocina. Se derrama el agua en el baño. Se te va tu esposa. Tu hijo no deja de llorar. Tu mamá te regaña de que te la pasas pegado a las redes sociales, incluso cuando no la estás viendo.
10) Eres más susceptible a todo lo que ocurre en el mundo y como no aprendiste a dominar sus emociones a lo que vez en una red social, terminas cerrándola. Y abres nuevas cuentas en otras redes sociales, porque ni modo de leer libros físicos o tener vida social real.
Hay muchas más que estas 10 consecuencias de la adicción a las redes sociales, como aquella del síndrome de la selfie con la pose idéntica y que sólo varía en la ropa y en el fondo, pero no puedo seguir en esto, voy a revisar las mías porque hace 15 minutos no lo hago y sé que me necesitan aunque no me lo digan, no me lean, no me crean y no me quieran, pero sé que les soy indispensable.
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