He de exponer acá quien he sido en el humor, la
picardía, las bromas y los trucos. Es poco, porque la memoria como que me
falla…o no me acuerdo.
Es una serie de post dividido en 5 facetas mías,
acordes a cada blog que tengo. Un poco de mí, hoy 27 de enero de 2015, fecha en
la que cumplo 40 años de vida (480 meses). Los otros post están en: www.periodistech.blogspot.com
– www.catolistech.blogspot.com
– www.coraljmv.blogspot.com
– www.romantistech.blogspot.com.
Estos post los iré agrandando transcurrido el
tiempo, con mayor y mejor anecdotario; hay bastante del pasado qué contar,
aunque no sea la gran cosa, soy yo. Y agradezco su deferencia al leerlo/s.
Cuando tenía 04
años, mientras otros niños jugaban, yo veía Radio Rochela (programa humorístico
de antología), aprendiendo a imitar, los chistes. Creyendo siempre que eso era
en vivo y que entre parte y parte (sketches), los actores se cambiaban en una
máquina mágica que los disfrazaba. Sí, mi inocencia era así. Y aún lo es.
La televisión
era mi fijación. Mi mamá veía los programas conmigo para que aprendiera a
diferenciar la realidad de la ficción, evitando así que me colocara un trapo en
el cuello y quisiera volar como Superman, pues por la sangre, mancharía el
trapo.
A los 14 años,
influenciado por el Conde del Guácharo y su estilo, decidí decirles a mis
padres que quería ser un cómico. Mi padre se engoriló y por años me reprochó.
Él tenía razón, debía estudiar y complementar mi vida, no era de otra forma. Y
así paulatinamente hice.
Años estudiando
a los humoristas, comediantes, series, comiquitas, revistas. Hice de Condorito
mi lectura ideal para reír, Mafalda la ideal para pensar, El Camaleón la idónea
para crecer en el mensaje, estilo y personalidad humorística.
La imitación
siempre fue mi fuerte, hasta que me dijeron que Charles Chaplin era bueno por
ser original, no por imitar. Así que busqué cabida a mí pensar junto al talento
de la voz. Eso me hizo destacar.
Cuando llegó a
Maracay el primer curso de Stand Up Comedy con Reuben Morales, no lo hice
porque ni pistas de quién era él o si era de esos cursos donde engañaban a la
gente como a las modelos, cantantes y artistas. Por no averiguar lo perdí.
Podría ya tener bastantes presentaciones y comprarme un carro como los
graduados en esa época. Pero no, no era mi momento. Y tampoco me gusta manejar
porque sería un atropellador de tarados a gusto y porque soy distraído pues.
Luego hice el
curso. Algunas presentaciones me han plenado el alma. La búsqueda de material
para mis rutinas con organización y técnica, me ha ayudado a encontrar
recovecos de mi mente y alma que no había tocado. Cualquiera cree que digo la
gran vaina, pero sí hago reír, cumplo a quien me contrata y me nutro el alma.
Una de mis
realidades es que no tengo botón de autoestima, sino botón de autodestrucción. Los feos
rechazados por las mujeres somos así. Bueno, otros se dan chicharrón. Yo
prefiero comerlo, si me va a dar matarile, que sea el colesterol. Que lo que me
dañe no dañe a los demás es mi forma de humor.
En estos tiempos
en que hay que buscar una panacea ante tanta maldad, estupidez y desparpajo del
alto y medio gobierno bajo, somos los humorismo sin amparar pugnas y sin caer
en lo monotemático. Hay vainas que repugnan, aparte de mi cara.
“Quien hace reír,
enamora”. Siempre quiero patear en el peroné a quienes dicen esa mentira. Pero desde otro
ángulo, reír es mi forma de enamorarme de la vida. Mientras la risa no sea
mofa, prepotencia o esquizofrenia. Porque eso es de políticos, ladrones, gente
que hace Bullying y El Guasón.
Veo comiquitas
desde toda mi vida y ahora, cuando debería verlas con mis hijos, las veo solo
porque hijos no tengo. Y a esta edad soy más juzgado por ver eso, hasta por mí
mismo. Pues entonces, seré culpable, vilipendiado y sentenciado, pero seguiré
viendo comiquitas y series como un niño, porque eso es lo que soy, tenga la
edad que tenga. Quizás soy el propio niño que Dios no me concedió tener. Y
quien mata a su niño interior, es un pobre adulto.
Canto, imito y
hablo solo, en la ducha o en las calles. Cuán loco me han tratado, pues así me
he portado y formado. Cuando hago reír, la vida se me extiende.
“El humor es un
idioma universal tan grande, que hasta los bebés lo ejercen y practican”. Es mi
forma de comunicación, amparada hasta por mis profesores universitarios,
quienes refrendaron quién y como soy. Mis padres lo refrendan, mis redes
sociales también, este, mi blog principal, el que hice para expresar este
poder, lo refrendan.
Y conseguir
damas y caballeros que comparten el mundo de las risas, me hace recordar que no
estoy solo. El humor es un aliciente, muleta y escudo del alma y la mente, para
luego enfrentar al mundo con la libertad del pensamiento y de las acciones
correctas, de quien no está lleno de lo malo del mundo.
“Humor y paz, hagamos
alegría”. Mi consigna, para que siempre estemos en sintonía. Y también con
FUNDAFLOJERA, que es la que me hace feliz porque no me desgasto, me aprovecho
con moderación, eso cuida mi ternura tersa y simpatía. Sí, es un sofismo mío,
pero vale.
5 momentos grandes en el predio del humor, que ahora
recuerdo:
Casting en “A Gozar” de
RCTV. Llegué tarde porque el autobús se retrasó, me hicieron la prueba al lado
de los contenedores de basura y la gerente me dijo “tienes talento para quedar,
pero la mala suerte te acompañó”. “Talento”, palabra que valió el viaje.
Reseña de mi blog en “El
Nacional”, donde invitaban a las personas a evaluar mi estilo de humor. Una
gran sorpresa.
Escribir en “El
Camaleón”, gracias al Dr. José Inojosa que me enseñó a mejorar mi humor y me llevó al predio impreso y a Graterolacho que me dio
espacio.
Con mi Coral José María
Vargas, abrimos un show de Laureano Márquez a beneficio de la Sociedad
Anticancerosa. Con mi interpretación de “El Manisero”, puse a reír al público. Siento
que preparé el camino para un gran show del maestro Márquez.
El Stand Up Comedy, que
me permite mostrar una segunda vertiente, más ácida y grotesca, sin humillar ni
vejar al público, sumándole el humor de este blog, la publicación de mi libro y
en este 2015, me estreno como escritor para n programa radial.
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