Ciclo: Relatos cortos para WhatsApp (2)

Érase una vez un señor muy pobre y humilde.

Éste señor no tenía televisión y vivía alejado, junto a su esposa y 11 hijos, nacidos todos por la falta de televisión. Por ello, luchó bastante, trabajando de sol a sol para que a sus hijos no les faltara nada, quitándose gustos y sólo viviendo por ellos y no con ellos. El señor hizo una buena fortuna y cayó enfermo, entonces su esposa se buscó un negro que la hiciera vibrar, sus hijos se buscaron hombres de mala muerte y las hijas mujeres de mal vivir, el perro se raspó a la gata y el perico invocaba al diablo de vez en cuando. Entonces cuando el señor iba a morir, les dijo a todos que el dinero estaba en las paredes de la casa. Todos comenzaron a derrumbar la misma y al final se dieron cuenta que lo que quiso decir es que era la casa la inversión. El terreno era municipal, no pudieron registrarlo, se rumbearon el dinero y comenzaron los hijos, hijas y viuda + el negro a pedir en las calles, matando panas en las camionetas e inventando enfermedades que @Humoristech jamás les cree. El buen hombre los supo joder a todos.
Moraleja: Pide tu salsa de ajo en un vaso aparte para que no le quites el pote a los demás, sí le vas a echar mucha.

No hay comentarios.:

Entradas populares