Es interesante el mercado de
casa en venta o alquiler en los Estados Unidos y estoy seguro que ocurre igual
en todo el mundo.
Porque las personas se
endeudan y trabajan incansablemente, muchas veces uno nada más (el hombre) cuando les sucede algo, no pueden pagarla,
entonces tienen que ponerla en venta o alquiler o por último, prestarla.
Sí, prestarla para que las
productoras porno hagan sus películas allí y así, con lo que les paguen por el
alquiler, pueden salvarla de una hipoteca, de un embargo, de que se caiga la
pared donde están los jarrones en cristal de plomo francés que con tanto
trabajo compraron y no quieren dejar por lo importantes que son.
Entonces se sucede que la
casa pasa a ser la principal protagonista de una película que va a financiar a
otras películas, porque no sé sí se los han contado, pero el cine XXX es el que
financia con sus impuestos a Hollywood y demás producciones independientes. Así
que cuando usted ve los Avengers, ya sabe que fue gracias a alguien que abrió
las piernas.
Esas casas hermosas, con
muebles exquisitos, pinturas soñadas y demás cosas que yo no sé porque no veo
porno, no me gusta ver la felicidad ajena y menos a otros hacer lo que yo tengo
años que no hago, pero sé que es así.
Imaginemos a los orgullosos
dueños, invitando a sus amigos la casa
para contarles que la recuperaron, ¿qué les dirían?, pues algo así de seguro
harían o hacen:
v ¿Tú ves esas sábanas?, mira las de mi cuarto. Adivina
donde fue que espernancaron a esa actriz. ¡Exacto, aquí en mi cama, mi cama es
famosa ya!, ¿No me crees?, ¡mira el pegoste que dejó el actor!, ¡tremenda
marca, ¿no?!
v En ese cojín donde tú estás sentada, lo hicieron varias
veces, amiga.
v Sí, nosotros cuidamos la casa no la fueran a perjudicar
ni a perderle el respeto, nos calamos toda la grabación.
v ¡Ay amiga, fue tan bueno que ahora estamos experimentando
con lo de swinger!, ¿Quieres participar?, ¡se gana bien y se goza más!
v La gente de la comunidad y el párroco nos denunciaron,
pero bueno, son cosas que suceden pues, mientras esté la casita.
Y así un montón de cosas más
ganadas de una casa en venta o alquiler, en la que otros fueron a hacer lo que
sólo deberían hacer los de esa casa.
Claro, sin ganar royalties y
pudiendo ser sancionados y presos por estar alentando ociosidades, ¡pero al menos
se salvó la casita!
Y ya paro este post porque
la verdad que me da asco que me agarren mi casita para esas ociosidades que yo
no puedo hacer porque en realidad, esta casa no es mía.
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